Los gusanos son un problema grave en las clínicas de pequeños animales, especialmente en las gastrointestinales. Los antihelmínticos se utilizan en los perros para la prevención y el control de estas infecciones, así como en el tratamiento de los ya infectados. La prescripción de fármacos, ya sean preventivos o curativos, debe ser estratégica y racional de usar, evitando así posibles parasitosis resistentes (PRADO et al., 2021).